Se han agrupado las distintas obras en colecciones que constituyen a su vez las etapas de mi trabajo. En algunas se muestran obras figurativas con asuntos que se someten a un relato determinado y que se complementan con una narración que surge de la imagen o que se produce en sentido inverso. Es el caso de Madrid marítimo o Gangsters y Falleras. Otras obras, figurativas de paisaje y retrato son autónomas y responden a otros momentos y necesidades expresivas que se agrupan en Retratos de familia, Retratos artificiales o Paisaje interior.

Por último, las colecciones de obras no figurativas como Términos o Imágenes ilegales, tienen su origen en aglomeraciones o estructuras, que en los años 70 mostraban escenas de la ciudad invadida por la basura. Punto límite es, de alguna manera, consecuencia de todas ellas y un intento exacerbado de expresión no sujeta más que la acción inmediata y a la contradictoria búsqueda del azar.